Probablemente nunca o en contadas en ocasiones he contado el motivo de querer formar parte del mundo periodístico, cómo llegué a enamorarme de esta profesión, cómo llegué a enamorarme del periodismo.
Uno de los principales motivos, o seguramente el principal, es la radio. La radio es mi medio favorito, mi medio fetiche. Ni televisión, ni prensa escrita ofrece lo que la radio puede hacer, sencillamente son completamente distintos. La radio, en mi opinión, cuenta con los mejores profesionales de la comunicación que hay.
Volviendo al origen de mi historia con el periodismo, he de decir que mi pasión surgió de una radio autonómica, Onda Madrid. Cada semana me enganchaba a Onda Madrid para escuchar lo que pasaba con los equipos madrileños, contado siempre con gran pasión y, siempre, con un toque de humor. Esta radio estaba formada por José Luis Poblador, Carlos Rodríguez o Carlos Sánchez Blas, entre otros. La mayoría de estos profesionales fueron despedidos por el ERE que hubo en RTVM o, actualmente, se encuentran trabajando en otro medio, otros continúan luchando para que este medio siga existiendo. Gran parte de este medio se ha perdido por el anteriormente mencionado ERE, se ha destruido.
Ahora, tenemos que convivir con un medio con una línea editorial claramente posicionada, tenemos que convivir con un medio donde la calidad y el espacio de sus programas es ínfima, si la comparamos con los programas que antaño componían la parrilla de Onda Madrid, esto se hace totalmente visible también en el medio televisivo madrileño, Telemadrid.
En la Comunidad de Madrid no llueve tanto si lo comparamos con la Comunidad Valenciana, donde canal Nou y Nou Radio fueron cerrados totalmente, dejando a miles de trabajadores sin trabajo. Actualmente, ciudadanos de la Comunidad Autónoma que sea, debe esperar a las desconexiones territoriales que se producen en las radios generalistas para estar informados de los que ocurre en su región.
Todos los españoles, pertenezcan a la autonomía que pertenezcan, merecen un medio autonómico de calidad, donde escuchar lo que en su región ha sucedido de una manera normal. Esto también se hace completamente visible en RTVE, donde la calidad de sus programas ha disminuido increiblemente.
Hasta pronto.
¡VIVA LA RADIO!
Uno de los principales motivos, o seguramente el principal, es la radio. La radio es mi medio favorito, mi medio fetiche. Ni televisión, ni prensa escrita ofrece lo que la radio puede hacer, sencillamente son completamente distintos. La radio, en mi opinión, cuenta con los mejores profesionales de la comunicación que hay.
Volviendo al origen de mi historia con el periodismo, he de decir que mi pasión surgió de una radio autonómica, Onda Madrid. Cada semana me enganchaba a Onda Madrid para escuchar lo que pasaba con los equipos madrileños, contado siempre con gran pasión y, siempre, con un toque de humor. Esta radio estaba formada por José Luis Poblador, Carlos Rodríguez o Carlos Sánchez Blas, entre otros. La mayoría de estos profesionales fueron despedidos por el ERE que hubo en RTVM o, actualmente, se encuentran trabajando en otro medio, otros continúan luchando para que este medio siga existiendo. Gran parte de este medio se ha perdido por el anteriormente mencionado ERE, se ha destruido.
Ahora, tenemos que convivir con un medio con una línea editorial claramente posicionada, tenemos que convivir con un medio donde la calidad y el espacio de sus programas es ínfima, si la comparamos con los programas que antaño componían la parrilla de Onda Madrid, esto se hace totalmente visible también en el medio televisivo madrileño, Telemadrid.
En la Comunidad de Madrid no llueve tanto si lo comparamos con la Comunidad Valenciana, donde canal Nou y Nou Radio fueron cerrados totalmente, dejando a miles de trabajadores sin trabajo. Actualmente, ciudadanos de la Comunidad Autónoma que sea, debe esperar a las desconexiones territoriales que se producen en las radios generalistas para estar informados de los que ocurre en su región.
Todos los españoles, pertenezcan a la autonomía que pertenezcan, merecen un medio autonómico de calidad, donde escuchar lo que en su región ha sucedido de una manera normal. Esto también se hace completamente visible en RTVE, donde la calidad de sus programas ha disminuido increiblemente.
Hasta pronto.
¡VIVA LA RADIO!
No hay comentarios:
Publicar un comentario