Tras tres partidos seguidos perdiendo el Chelsea jugaba la más importante de las "finales" que tenía Mourinho esta semana.
El Bridge era presidido por una gran pancarta que decía en inglés "Mourinho, uno de los nuestros"
El 11 del Chelsea comenzó con muchas novedades. La principal fue que el español Cesc Fàbregas partió desde la mediapunta, desplazandose Oscar a la banda izquierda y quedándose Hazard con Pedro en el banquillo. Otra de las novedades fue la suplencia del internacional inglés Gary Cahill. Su puesto en el once lo ocupó el francés Kurt Zouma que fue la sorpresa en defensa junto al joven lateral izquierdo Baba Rahman.
El partido comenzó con el Chelsea atacando y con Fàbregas muy móvil en esta posición, pero poca a poco el partido se fue equilibrando. En el minuto 29 un posible penalti sobre Diego Costa levantó a Mourinho del banquillo, pero el arbitro no indicó nada. Tres minutos después un balón es despejado por parte de Baba Rahman. El despeje se convirtió en un pase largo que William controló, centró y Dragović, central que suena muy fuerte para Enero para el propio club londinense, remató involuntariamente dentro de su propia portería. Así se llegó al descanso.
El Dynamo dio un arreón tras el descanso, de hecho Begović tuvo que hacer una tremenda estirada para detener el disparo. Reciperó la iniciativa el Chelsea y estuvo apunto de sentenciar primero con un remate de Zouma y posteriormente con un disparo de Oscar tras una mala salida del balón del Chelsea. Cuando mejor estaba el Chelsea Yarmolenko botó un corner en el que Begović salió en falso, Terry abandonó la marca y Dragovic remató a placer.
Mourinho decidió tomar medidas y saltaron al campo Hazard y Pedro. Los cambios surtieron efecto, ya que en una jugada por la banda izquierda, Hazard recibiría una falta. William pidió el balon y con ese guante que tiene por pierna derecha anotó un autentico golazo de falta directa. Al portero se le hizo imposible llegar al balón, que mete de pleno en la lucha por la clasificación.
Mourinho salva su primer "Match Ball" y el Chelsea coje fuerzas para su próximo partido el sábado en Stoke.
Foto: chelseafc.com
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